Tribuna de opinión

"La importancia de la economía social y la contribución de los centros especiales de empleo de iniciativa social"

Pepa Torres
Secretaria general de FEACEM
Foto Pepa Torres

El empleo de calidad es esencial para garantizar la igualdad de oportunidades de las personas y contribuye a su plena participación en la vida económica, social y cultural.
 
Para las personas con discapacidad, a pesar de los avances, principalmente jurídicos, para promover la igualdad de oportunidades y luchar contra la discriminación, perduran las limitaciones en el disfrute de los derechos sociales y económicos, especialmente, en la participación en el mercado laboral.

Las propias dinámicas del mercado laboral se están configurando como barreras que impiden y/o limitan el acceso y mantenimiento del empleo de los colectivos vulnerables.
 
En un contexto disruptivo, de escasez de oportunidades laborales y en el que es fundamental focalizar la actividad empresarial en el  desarrollo sostenible y en la centralidad de la persona, la economía social tiene un papel fundamental como impulsora de estos aspectos, como fórmula de generación equitativa de riqueza, como instrumento de equilibrio territorial y como empresas con valores y generadoras de oportunidades laborales para corregir los desequilibrios y desigualdades que se producen en el mercado laboral.

Los Centros Especiales de Empleo de Iniciativa Social (CEEIS) como paradigma de la empresa social y como entidades de la economía social, compaginan y promulgan el equilibrio entre el “valor social” y la “rentabilidad económica”. Son un modelo de empresa en el que priman las personas y que reinvierten los posibles beneficios en su fin social. Estas características identitarias los convierten en fórmulas de empleo que aportan un importante “valor social diferencial y reforzado”: generan empleo, principalmente para personas con discapacidad; su finalidad no es tanto la generación de beneficios como su impacto social; prima el equilibrio entre “lo social y lo económico” para garantizar su sostenibilidad; aprovechan sus superávits para alcanzar sus objetivos sociales; la persona con discapacidad es el centro, su razón de ser.
 
La aportación social de los CEEIS es un claro ejemplo de cómo se da respuesta a una problemática social y cómo las políticas públicas deben ser un instrumento que fomenten y apoyen iniciativas que persiguen, desde los valores, la inclusión laboral de las personas con discapacidad.