Una Unión de la Igualdad, el último paso para una Europa inclusiva

El pasado mes de marzo, la Comisión Europea adoptó la Estrategia sobre los derechos de las personas con discapacidad para 2021-2030, la cual, tiene como lema “Una Unión de la Igualdad” y espera convertirse en el texto que apuntale la plena inclusión de este grupo social y garantice su participación activa en la sociedad.

Por
Cesar Jiménez Cruz
La nueva estrategia tiene como objetivo la inclusión de 87 millones de personas.

La adopción en 2006 de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas marcó un hito en el establecimiento de unas normas mínimas para los derechos de las alrededor de 87 millones de personas con discapacidad que viven en la Unión Europea y, desde ese momento, la Unión y sus Estados miembros han ido avanzando en su implementación.

La Estrategia sobre los derechos de las personas con discapacidad para 2021-2030 es la continuación de la anterior Estrategia Europea sobre Discapacidad 2010-2020, puesto que, tal y como sostiene la Comisión Europea, “a pesar de los avances realizados en la última década, las personas con discapacidad aún se encuentran con obstáculos considerables y corren mayor riesgo de pobreza y exclusión social”.

Esta problemática afecta significativamente a los derechos de las personas con discapacidad, los cuales, se han visto todavía más deteriorados como consecuencia de la pandemia de la COVID-19. En concreto, esta pandemia ha provocado que las personas pertenecientes a este grupo social hayan visto deteriorado su estado de salud, ya sea por haberse contagiado por la enfermedad, o bien por no haber podido continuar con su tratamiento o rehabilitación debido a las medidas sanitarias impuestas.

En este sentido, el objetivo de la nueva estrategia es “avanzar hacia una situación en la que, con independencia de su sexo, origen racial o étnico, religión o creencias, edad u orientación sexual, todas las personas con discapacidad en Europa puedan hacer valer sus derechos humanos, disfruten de igualdad de oportunidades y de participación en la sociedad y la economía, puedan decidir dónde, cómo y con quien viven, puedan circular libremente en la Unión Europea, independientemente de sus necesidades de ayuda, y no sufran discriminación”.

La Comisión apoyará a los Estados miembros en la elaboración de sus estrategias y planes de acción nacionales para avanzar en la aplicación de la Convención de discapacidad de Naciones Unidas y la legislación de la Unión en este ámbito. Además, la Comisión Europea les pide a los Estados miembros que contribuyan a esta nueva Estrategia reforzada como marco para las acciones de la Unión y para la aplicación de la citada Convención.

La Comisión Europea muestra así su compromiso por que los derechos de las personas con discapacidad se vean garantizados y mejorar así la calidad de vida de las personas con discapacidad, tanto dentro como fuera del territorio comunitario.

“Es nuestra obligación garantizar su plena participación”

“Las personas con discapacidad tienen derecho a disfrutar de unas buenas condiciones en el lugar de trabajo, a vivir de forma independiente, a beneficiarse de la igualdad de oportunidades y a participar plenamente en la vida de su comunidad. Todas ellas tienen derecho a vivir una vida sin obstáculos”, afirma la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la citada Estrategia, al tiempo que añade que “es nuestra obligación, como comunidad, garantizar su plena participación en la sociedad, en igualdad de condiciones con los demás”.

Para conseguir estos objetivos, es necesario la acción coordinada, tanto a nivel nacional como a nivel comunitario, así como el compromiso por parte de los Estados miembros y de las Administraciones Públicas locales y regionales de aplicar las medidas propuestas por la Comisión Europea.

El director general de Derechos de Personas con Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, Jesús Martín, considera que esta Estrategia “supondrá un instrumento renovado en la Unión Europea para que las personas con discapacidad seamos y estemos en Europa”. “Es una palanca para que nuestra inclusión sea Ley”, añade.

Sin embargo, hace hincapié en que “las estrategias, si bien nos marcan la hoja de ruta, debemos ser en este caso los Estados los que pongamos las metas y allanemos el camino para que sea una herramienta transformadora” y a este respecto asegura que “el compromiso es clave con Europa y aportaremos para que en 2030 tengamos una Europa más social en la que la diversidad humana sea un valor europeísta”.

Con respecto a su implantación, Martín argumenta que “esta Estrategia se proyecta como una hoja de ruta posibilista, para que el Estado español, a través de sus administraciones y poderes públicos, contribuya a aterrizar los derechos humanos en nuestras vidas y en la de nuestras familias”. “Para ello, en su elaboración estarán muy presentes la Convención de la Discapacidad y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, incide.

Por lo tanto, España será la encargada de establecer las medidas necesarias para dar cumplimiento a esta Estrategia sobre los derechos de las personas con discapacidad para 2021-2030 y garantizar su plena inclusión, así como la igualdad de oportunidades y derechos.

En concreto, Martín explica que “será concebida desde un enfoque interseccional y feminista bajo los principios de democracia y >> 32 | enmarcha 134 REPORTAJE “Es nuestra obligación garantizar su plena participación” participación a lo largo de todo el proceso” e indica que ahora está previsto que se inicie una fase que “cuente con las entidades representativas de la discapacidad, las Administraciones Públicas, tanto estatales como autonómicas y locales, y demás agentes interesados, entre los que cobra especial relevancia el papel de las propias personas con discapacidad y sus familias”.

A este respecto, el presidente de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE), Anxo Queiruga, destaca la importancia de que “las medidas que afecten a las personas con discapacidad cuenten con el movimiento asociativo que las representa”, ya que “somos las personas con discapacidad quienes mejor conocemos nuestras necesidades y las diferentes formas de responder a las mismas”. Por ello, añade: “desde COCEMFE y nuestro Movimiento Asociativo haremos todo lo posible para que queden recogidas en la estrategia, como hacemos con toda la normativa que tiene incidencia sobre las personas con discapacidad física y orgánica”.

“La Estrategia dará respuesta a desafíos transversales”

Por su parte, Martín cree que “la Estrategia dará respuesta a desafíos transversales como la emergencia climática y el reto demográfico para estar con la España de los pueblos, de las aldeas y de los campos donde también viven personas con discapacidad, a las que hay que escuchar y acompañar” y señala que “para ello, se nutrirá del conocimiento y la experiencia de las comunidades autónomas y las entidades locales con el fin de concebir un instrumento que fortalezca la cooperación territorial”.

“Si no cumple ese resultado, habremos fracasado”, destaca el director general de Derechos de Personas con Discapacidad, que concluye que “la estrategia debe estar conectada a los derechos, pues son las leyes las que fijan la esencia y el destino de un país, y esas leyes deben estar abiertas a la discapacidad, pues un país que respeta la diversidad es un país que se respeta a sí mismo”.

Queiruga pone en valor la necesidad de que se establezcan mecanismos de revisión de cumplimiento de las medidas destinadas a implementar esta Estrategia en España para que “todas estas buenas intenciones se traduzcan en la eliminación de todos los obstáculos que nos impiden una plena inclusión y participación activa en la sociedad”.

Seguir dando pasos en favor de la igualdad de las personas con discapacidad es fundamental para que, cuando pase el tiempo, poder echar la vista a atrás y comprender todo lo que se ha avanzado para que la Unión Europea en general y España en particular sean unos territorios aptos para que las personas con discapacidad puedan disfrutar la vida que desean.

“Cada paso supone un ladrillo en la construcción del puente que es la inclusión”, destaca Queiruga que pide a las Administraciones Públicas que “no se olviden de las millones de personas con discapacidad que se encuentran al otro lado del puente y contribuyan a unir ambos mundos y la población con y sin discapacidad pueda gozar de las mismas oportunidades y de los mismos derechos”.

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